sábado, 19 de noviembre de 2011

Tarta de la Mama


Hace días que no pongo ninguna receta... así que voy a poner una de las que tenía especialmente reservadas. No tengo fotos de todo el proceso, como sería ideal, sin embargo veréis que no tiene ningún misterio. Pero el resultado es impresionante, realmente.
Mi madre me pasó esta receta, sin embargo ya entonces se llamaba "tarta de la mamá", no sabría decir de qué libro o revista sacó esta receta.
La textura de esta receta es especialmente suave, y el sabor a chocolate es intenso. Normalmente no se come más que un trozo pequeño, porque llena bastante.
Eso no debería ser malo...
Los ingredientes son:
- 250 gramos de chocolate
- 250 gramos de mantequilla.
- 250 gramos de azúcar.
- 4 huevos.
- 1 cucharada sopera de harina.

Como podéis ver, uno de los trucos para la textura de la tarta es la poca presencia de harina. Y el resto de ingredientes, en proporciones equilibradas, también os hará deducir por qué llena enseguida.

Comenzad fundiendo el chocolate al baño María, y cuando esté totalmente fundido mezclad bien con la mantequilla y el azúcar.
Batid los huevos y lo mezcláis con la harina (en este caso no será difícil evitar grumos con poco esfuerzo), y mezclad con el resto en una masa bien ligada.
Mientras, precalentad el horno para ganar tiempo.
Verted el contenido en un molde engrasado con mantequilla. Yo suelo usar un molde de tarta no muy profundo.
Y he aquí el truco final: se hornea al baño María, para lo cual debéis echar agua en la bandeja del horno. Haced esto antes de introducir el molde, para que también se caliente el agua. Después, dejadlo unos 25 minutos a 180 grados.
Como podéis ver, el resultado no es complicado, y esta receta es deliciosa.


Por último y para acompañarle, la recomendación musical para esta tarta podría bien ser Olivia Ruiz y su "Femme Chocolat"


¡Buen provecho!

martes, 8 de noviembre de 2011

Vente a la Boquería, primo

En algunas ciudades que visito de vez en cuando, aunque no con tanta frecuencia como querría, existen lugares recurrentes a los que me gusta regresar una y otra vez. Relativamente cerca de Zaragoza, en Barcelona, tenemos un lugar paradisíaco para los amantes de la comida, la cocina e incluso la fotografía: el mercado de La Boquería.
Por lo visto su nombre real es Mercado de San José,está en la Rambla, por lo que su ubicación es excelente. Lleno de turistas, y por lo visto por las noches se llena de otro tipo de negocios, aunque eso no lo he constatado.
La boquería tiene puestos de frutas que te saltan a los ojos, ya sólo con sus colores te entra hambre, y en muchos de ellos tienen frutas exóticas o fresas (no fresones, fresas) para comer en el momento.

Además de frutas deliciosas, hay variedad de zumos preparados de colores llamativos que son muy consumidos por los curiosos del mercado.
Los puestos de verduras hacen que quieras ponerte a cocinar enseguida, lo malo en ese caso es si eres de fuera. Encuentras vegetales de muy buen aspecto, y a mí en particular me gusta mucho un puesto que tiene sobre todo setas, y también tallos de ensaladas deliciosos y flores para cocina.



Al que le guste encontrar cosas ricas para sazonar, encontrará especias, ajos, chiles... al natural y a granel...

O en envases traídos de diferentes países, además de una extensa colección de comida internacional. Yo aquí compré un bote de mole que usé hace poco para cocinar pollo y servir con tortitas de maíz. Una compra muy rentable.


Además hay puestos de gominolas perfectos para regalar o para devorar en el momento.

Si realmente se te hace tarde o llega la hora de comer y aún estás por allí, lo mejor es dar una vuelta por la sección de comidas preparadas: italiana, griega, japonesa... al peso y super rico, una buena opción para comer luego en el puerto o por las ramblas.

Por si todo esto no ha bastado, además de todo lo que se puede ver y disfrutar en Barcelona, cuenta la leyenda que hay un puesto en La Boquería donde venden insectos comestibles (hormigas, gusanos fritos, etc.), yo tengo en una guía el número exacto del puesto, pero creo que la auténtica gracias del asunto es tratar de encontralo paseando.
¡Buen provecho!

miércoles, 2 de noviembre de 2011

HUESITOS DE SANTO DEL DIA DE LOS MUERTOS

Una buena amiga me sugirió un montón de recetas de Todos los Santos y Halloween, pero el poco tiempo que tengo últimamente me ha hecho decantarme por sólo una para este día de fiesta: huesos de Santo.
En teoría es sencillo, ya que básicamente hay que hacer mazapán, luego yema, y juntarlos dándole forma. Sin embargo nos ha mantenido entretenidos una buena parte del día. Eso sí, ahora me estoy comiendo uno y está muy bueno, se nota mucho la diferencia del mazapán casero y del de las figuritas navideñas de caja grande.
Me he basado en la receta de Eroski Consumer, aunque he cambiado algunas cosas en base a la experimentación.
Los ingredientes son:
Para el mazapán:
100 gramos de agua
200 gramos de azúcar
150 gramos de almendra molida.
Para la yema:
100 gramos de azúcar.
50 gramos de agua.
4 yemas.

Lo primero que hemos hecho ha sido el mazapán. Hay que hacer un almíbar fuerte con el agua y el azúcar al fuego y removiendo.

Después añadid las almendras molidas y revolver hasta hacer una pasta homogénea.

 En nuestro caso, con esta proporción, nos ha quedado muy seco para poder moldearlo, así que hemos echado más agua y lo hemos vuelto a reducir al fuego, hasta conseguir una pasta homogénea y modelable.
Por último, dejadlo enfriar.

Para preparar la yema hay que separar las yemas de las claras, por supuesto, y luego batirlas.  Igual que antes, debéis preparar almíbar con el azúcar y el agua, y cuando esté listo lo vertéis sobre las yemas batidas al tiempo que lo mezcláis. Lo ponéis en un recipiente para calentarlo al baño María, en el que revolveréis hasta tener lista una pasta muy espesa. Tenéis que cuidar que no llegue a hervir.

También hay que dejarlo enfriar.
Para el montaje final debéis esperar a que ambas masas estén frías. Sobre todo el mazapán debe estar moldeable, para lo cual os ayudará el azúcar glass.

Debéis amasar y estirar el mazapán en una superficie espolvoreada con esto. Después, cortar en cuadrados (según la web de referencia, en tiras de 4 centímetros primero y luego en cuadrados; yo lo he hecho a ojo).
La página web te recomienda otro tipo de montaje, que sin duda ayudará a que la forma quede más "perfecta", necesitaríais la ayuda de una manga pastelera con la boquilla fina. Nosotros lo hemos hecho de forma más intuitiva, ya que poníamos en el centro yema y enrollábamos, ayudando con los dedos a sellar el borde. Y lo rebozábamos en azúcar glass.

Después de hacer esto hasta que se ha acabado la yema, hemos devorado el mazapán que sobraba y yo personalmente tengo un subidón de azúcar. Pero todo muy bueno.
Aunque normalmente escribo recetas que ya he experimentado y constatado anteriormente en varias ocasiones, esta vez me atrevo a poner una después de la primera vez que la hago. Así que algunos aspectos quedan para mejorar: el mazapán debería haber estado algo más duro, y la forma de los huesos es mejorable. Seguramente siguiendo las instrucciones exactas quedará perfecto.
Por lo demás, no creo que sobrevivan mucho tiempo en casa...

Para terminar, un tema muy dedicado al día que acaba, para bajar el subidón de azúcar a base de gospel.

¡Buen provecho!